A falta de datos oficiales acerca del vertido presuntamente ilegal de la EDAR BENS, ARCO IRIS ha adoptado la decisión de establecer un sistema de vigilancia del by pass por el que salen directamente las aguas residuales al mar. Las obras de la depuradora han neutralizado en emisario, por lo que la EDAR se ve obligada a eliminar las aguas con un mínimo pre-tratamiento.
Los primeros resultados no ofrecen lugar a dudas y, a pesar de la elevada probabilidad de que la EDAR esté usando productos tóxicos y detergentes para aminorar la carga contaminante bacteriológica, ARCO IRIS afirma que los vertidos que se emiten incumplen las normativas vigentes en materia de aguas de baño, ya que la carga de bacterias fecales supera los límites permitidos. Según la Directiva 2006/7 CE, EDAR BENS incumple esos parámetros que, aunque no son estrictamente obligatorios para autorizar un vertido de esta magnitud, sí dan una idea acerca del poder contaminante del mismo.
De hecho, la playa del Portiño, al lado mismo de la EDAR, fué eliminada de la lista de puntos de muestreo en 2020, según reconoce el propio informe del MITECO, alegando razones peregrinas, como la “integración” portuaria. Lo cierto es que la carga contaminante de la EDAR podría en ocasiones causar el cierre de la Playa del Portiño, lo que causaría una mala publicidad que EMALCSA no quería asumir bajo ningún concepto.
En estos momentos, se están procesando otras muestras físico-químicas que pondrán de manifiesto si los valores de DBO5, DQO Y SÓLIDOS EN SUSPENSIÓN se encuentran dentro de los margenes legales. También se ha solicitado una determinación de detergentes, a la vista de la gran cantidad de espuma localizada en
la zona el pasado día 31, cuanto se efectuaron los análisis por medio de un laboratorio industrial homologado. De los resultados de esas determinaciones se dará cumplida información a la opinión pública.
